Descripción
En 1231, esta iglesia sustituyó la capilla del antiguo hospicio de San Biagio, donde vivió San Francisco durante su estancia en Roma, en 1219. Dentro de su celda todavía se puede encontrar la almohada de piedra y su crucifijo. Totalmente reconstruida por el cardenal Pallavicini en 1680, la iglesia está llena de esculturas.
El interior es muy sencillo y está dividido en tres naves con numerosas pilastras. Los pasillos albergan tres capillas cada una.
En la capilla de Altieri se encuentra la dramática escultura de Bernini, la Beata Ludovica Albertoni. También alberga un altar relicario de Bernini, así como un lienzo de San Francisco hecho conforme a la tradición de su devota Jacopa de 'Settesoli. En el oratorio se encuentra la tumba del gran pintor Giorgio de Chirico.
El interior es muy sencillo y está dividido en tres naves con numerosas pilastras. Los pasillos albergan tres capillas cada una.
En la capilla de Altieri se encuentra la dramática escultura de Bernini, la Beata Ludovica Albertoni. También alberga un altar relicario de Bernini, así como un lienzo de San Francisco hecho conforme a la tradición de su devota Jacopa de 'Settesoli. En el oratorio se encuentra la tumba del gran pintor Giorgio de Chirico.